Uno de los pilares de la economía 
de Los Tuxtlas es la producción del
tabaco en el Valle de San Andrés, una
práctica prehispánica que se conserva
hasta nuestros días y con una gran cálidad
reconocida internacionalmente.
SU HISTORIA
La planta se usaba en los inicios del período
clásico del pueblo maya 1- 500 D. C.; entre
el 300 y el 800 D. C. hay constancias de su
utilización en el Estado de Nayarit; también
en la Cultura Huasteca del norte de Veracruz
del 400 al 900 D. C. Su nombre científico es
Nicotiana Tabacum, pertenece a la familia de
las solanáceas y es originaria de América del
Sur (Manual de Protección de Plantas Ciba
Geigy), por eso en el Continente Americano
ya era costumbre fumar puros en la época
prehispánica, donde se le conocía como “Yietl”;
el tabaco no solo era usado para fumar, sino
también en algunas ceremonias: en los ritos
nupciales lo empleaban para sahumar a la
novia; también impregnaban con tabaco la
piel de los enfermos y de los niños, porque
para ellos el tabaco tenía un poder mágico
“Maná”, que actuaba espontáneamente sobre
las personas. También entre los nativos de
América tenía significado político, pues si un
pueblo lo enviaba a otro y era aceptado, esto
equivalía a una alianza militar. (Román Maritza
L. El Cultivo del Tabaco, 1986).
SU ORIGEN
Con la llegada de Colón a la isla de Cuba en
1492, Rodrigo Jerez y Luis Torres hacen el
primer redescubrimiento del tabaco y cuando
los españoles se establecen en Cuba como
colonos entre 1509 y1515 y fundan la ciudad
de la Habana, comienzan a cultivar la planta
extendiéndose su consumo por los continentes
americano, asiático y europeo.
COMO INICIA SU CULTIVO
En la región de los Tuxtlas se cosecha
tabaco de excelente calidad por lo que su
fama es internacional, prueba de ello son las
variedades: Jaltepec o Negro San Andrés,
Habano y Sumatra; este último, es utilizado
para la cubierta o envoltura de los puros.
San Andrés y Catemaco exportan tabacos
de primera calidad, que se expenden en las
más prestigiosas tabaquerías. Su cultivo es
sumamente preciso para alcanzar niveles
competitivos de calidad; existe una moderna
técnica de cultivo, conocida como plantío
Tabaco: Arte Puro
6
S a n A n d r é s
T u x t l a
aéreo, que consiste en depositar la semilla
en recipientes cónicos, para que germine
directamente sin trasplantar. La siembra de
riego es de febrero a marzo, mientras que
la de temporal se siembra después de las
primeras lluvias de mayo-junio, regularmente
en el mes de junio. La variedad del tabaco
negro se abona dos veces, en la primera
se utiliza una fórmula con tres ingredientes
y la última es con nitrógeno; en la segunda
abonada es cuando la planta ya tiene de
45 a 55 días, en esta edad la planta debe
ser capada quitándole la parte del “Cojollo”
para que tenga un buen desarrollo, llegando
a dar de 18 a 20 hojas cada mata; este
procedimiento sólo se hace con la variedad
“Negro de San Andrés”. Cuando la planta llega
a edad adulta esta debe ser deshijada.
La temperatura óptima para el cultivo varía
entre 18 y 28 grados centígrados durante
su fase de crecimiento, mientras que en
semilleros, se requiere una temperatura
superior a los 16 grados llegando a alcanzar
alturas de hasta 2.70 y 3 metros. Sus hojas
son alternas lanceoladas y glutinosas. Desde
que se corta empieza la segunda fase, que
se inicia con el secado dentro de las galeras,
utilizando gas como combustible; después,
se acomodan en pilones (troja) para su
fermentación y posteriormente se rezaga o se
clasifica para la venta.
La clasificación es por tamaño y color.
Posteriormente se realiza el despalille como se
conoce al proceso de quitar la vena principal,
y se acomodan las hojas en gavillas. De la
planta se aprovecha un 95 por ciento, con lo
cual se elaboran de 18 a 20 puros; asimismo,
el tallo y las hojas que no son utilizadas son
aprovechadas como fertilizante orgánico,
después de este proceso, viene la elaboración
de los puros.
SU ELABORACIÓN
Se selecciona la materia prima (tabaco y
banda), lo que es muy importante, ya que
podemos elaborar un puro fuerte o suave, es
muy importante controlar el peso del producto
en la báscula, por ejemplo un #4, su peso
máximo es de 10 a11 gramos, se utilizan unos
moldes para determinar la medida de largo.
Cuando es tiempo de calor el puro baja de
peso, y por el contrario en tiempo de humedad
aumenta, por eso es importante controlar
su peso todo el tiempo. El boncho que es el
acomodo del tabaco en forma cilíndrica se
pega utilizando una mezcla de una raíz con
agua la cual es llamada “Tragacanto”. Una vez
terminado el boncho se acomoda en moldes
donde pasan a la prensa
manual, al prensar se gira
el puro 180 grados para
que adquiera una forma
totalmente circular. Mas
tarde se le da el acabado
final que es el rolado,
donde se coloca la punta
por la que se fuma el
puro. El siguiente paso es
la colocación del anillo de
identificación, después se
clasifican por tonalidad
y se emplacan en cajas.
Elaborándose en promedio
7,000 puros diarios.
de Los Tuxtlas es la producción del
tabaco en el Valle de San Andrés, una
práctica prehispánica que se conserva
hasta nuestros días y con una gran cálidad
reconocida internacionalmente.
SU HISTORIA
La planta se usaba en los inicios del período
clásico del pueblo maya 1- 500 D. C.; entre
el 300 y el 800 D. C. hay constancias de su
utilización en el Estado de Nayarit; también
en la Cultura Huasteca del norte de Veracruz
del 400 al 900 D. C. Su nombre científico es
Nicotiana Tabacum, pertenece a la familia de
las solanáceas y es originaria de América del
Sur (Manual de Protección de Plantas Ciba
Geigy), por eso en el Continente Americano
ya era costumbre fumar puros en la época
prehispánica, donde se le conocía como “Yietl”;
el tabaco no solo era usado para fumar, sino
también en algunas ceremonias: en los ritos
nupciales lo empleaban para sahumar a la
novia; también impregnaban con tabaco la
piel de los enfermos y de los niños, porque
para ellos el tabaco tenía un poder mágico
“Maná”, que actuaba espontáneamente sobre
las personas. También entre los nativos de
América tenía significado político, pues si un
pueblo lo enviaba a otro y era aceptado, esto
equivalía a una alianza militar. (Román Maritza
L. El Cultivo del Tabaco, 1986).
SU ORIGEN
Con la llegada de Colón a la isla de Cuba en
1492, Rodrigo Jerez y Luis Torres hacen el
primer redescubrimiento del tabaco y cuando
los españoles se establecen en Cuba como
colonos entre 1509 y1515 y fundan la ciudad
de la Habana, comienzan a cultivar la planta
extendiéndose su consumo por los continentes
americano, asiático y europeo.
COMO INICIA SU CULTIVO
En la región de los Tuxtlas se cosecha
tabaco de excelente calidad por lo que su
fama es internacional, prueba de ello son las
variedades: Jaltepec o Negro San Andrés,
Habano y Sumatra; este último, es utilizado
para la cubierta o envoltura de los puros.
San Andrés y Catemaco exportan tabacos
de primera calidad, que se expenden en las
más prestigiosas tabaquerías. Su cultivo es
sumamente preciso para alcanzar niveles
competitivos de calidad; existe una moderna
técnica de cultivo, conocida como plantío
Tabaco: Arte Puro
6
S a n A n d r é s
T u x t l a
aéreo, que consiste en depositar la semilla
en recipientes cónicos, para que germine
directamente sin trasplantar. La siembra de
riego es de febrero a marzo, mientras que
la de temporal se siembra después de las
primeras lluvias de mayo-junio, regularmente
en el mes de junio. La variedad del tabaco
negro se abona dos veces, en la primera
se utiliza una fórmula con tres ingredientes
y la última es con nitrógeno; en la segunda
abonada es cuando la planta ya tiene de
45 a 55 días, en esta edad la planta debe
ser capada quitándole la parte del “Cojollo”
para que tenga un buen desarrollo, llegando
a dar de 18 a 20 hojas cada mata; este
procedimiento sólo se hace con la variedad
“Negro de San Andrés”. Cuando la planta llega
a edad adulta esta debe ser deshijada.
La temperatura óptima para el cultivo varía
entre 18 y 28 grados centígrados durante
su fase de crecimiento, mientras que en
semilleros, se requiere una temperatura
superior a los 16 grados llegando a alcanzar
alturas de hasta 2.70 y 3 metros. Sus hojas
son alternas lanceoladas y glutinosas. Desde
que se corta empieza la segunda fase, que
se inicia con el secado dentro de las galeras,
utilizando gas como combustible; después,
se acomodan en pilones (troja) para su
fermentación y posteriormente se rezaga o se
clasifica para la venta.
La clasificación es por tamaño y color.
Posteriormente se realiza el despalille como se
conoce al proceso de quitar la vena principal,
y se acomodan las hojas en gavillas. De la
planta se aprovecha un 95 por ciento, con lo
cual se elaboran de 18 a 20 puros; asimismo,
el tallo y las hojas que no son utilizadas son
aprovechadas como fertilizante orgánico,
después de este proceso, viene la elaboración
de los puros.
SU ELABORACIÓN
Se selecciona la materia prima (tabaco y
banda), lo que es muy importante, ya que
podemos elaborar un puro fuerte o suave, es
muy importante controlar el peso del producto
en la báscula, por ejemplo un #4, su peso
máximo es de 10 a11 gramos, se utilizan unos
moldes para determinar la medida de largo.
Cuando es tiempo de calor el puro baja de
peso, y por el contrario en tiempo de humedad
aumenta, por eso es importante controlar
su peso todo el tiempo. El boncho que es el
acomodo del tabaco en forma cilíndrica se
pega utilizando una mezcla de una raíz con
agua la cual es llamada “Tragacanto”. Una vez
terminado el boncho se acomoda en moldes
donde pasan a la prensa
manual, al prensar se gira
el puro 180 grados para
que adquiera una forma
totalmente circular. Mas
tarde se le da el acabado
final que es el rolado,
donde se coloca la punta
por la que se fuma el
puro. El siguiente paso es
la colocación del anillo de
identificación, después se
clasifican por tonalidad
y se emplacan en cajas.
Elaborándose en promedio
7,000 puros diarios.
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